Tratar de convencer a otra persona es indecoroso, es atentar contra su libertad de pensar o creer o de hacer lo que le dé la gana.
Yo quiero sólo enseñar, dar a conocer, mostrar, no demostrar. Que cada uno llegue a la verdad por sus propios pasos, y que nadie le llame equivocado o limitado.
(¡Quién es quién para decir "esto es así", si la historia de la humanidad no es más que una historia de contradicciones y de tanteos y de búsquedas?)
Si a alguien he de convencer algún día, ese alguien ha de ser yo mismo. Convencerme de que no vale la pena llorar, ni afligirse, ni pensar en la muerte.
"La vejez, la enfermedad y la muerte", de Buda, no son más que la muerte, y la muerte
es inevitable. Tan inevitable como el nacimiento.
Lo bueno es vivir del mejor modo posible. Peleando, lastimando, acariciando, soñando.
(¡Pero siempre se vive del mejor modo posible!)
Mientras yo no pueda respirar bajo el agua, o volar (pero de verdad volar, yo solo, con mis brazos), tendrá que gustarme caminar sobre la tierra, y ser hombre, no pez ni ave.
No tengo ningún deseo que me digan que la luna es diferente a mis sueños.
Jaime Sabines
1 Reacción:
Escribo deseándote un año lleno de salud y éxitos amigo... no coincidimos ahora con las fechas y por tanto no nos pudimos hechar unos alcoholes o cafés platicando de lo que se nos fuera ocurriendo o recordando historias como siempre lo hacemos, pero aún así debes saber que seguimos en contacto y que queda pendiente esa reunión. Nos estamos leyendo y escribiendo en nuestras webs (www.marczesar.com.mx). Un abrazo ka.
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